Hace un par o tres de años me dio por la danza (como espectador, obviamente). Nunca me había llamado la atención, ni la clásica ni la moderna, hasta que de repente un día decidí asomarme y me encantó. Seguramente no para convertirme en un forofo, pero sí para disfrutar de los buenos bailarines y de las buenas coreografías.
Llegué incluso a ir al teatro a ver una compañía rusa que llegaba a Barcelona con un Lago de los cisnes. Para ponerme al día me descargué una versión inmejorable que dio a entender lo maravillosa que era esa coreografía y esa música. Los rusos que yo vi resultaron ser unos petardazos, las bailarinas se caían, otras se lastimaban, el primer bailarín estaba pasado de quilos, el segundo no podía con su alma, a la bailarina primera se le movía el tutú, acortaron la obra, se daban de codazos en el diminuto escenario, y entre todos lograron no diré cargarse el Lago de los cisnes, pero sí desde luego reducirlo a su mínima expresión. Aquellos rusos vinieron a Barcelona a enredarnos, y nosotros que somos fácilmente enredables creímos que por el simple hecho de ser rusos bailaban de narices.
En aquellos días aprendí que una coreografía se basa en las llamadas variaciones, partes que con pocos o nulos cambios quedan fijadas dentro de esa coreografía. A veces resulta divertido entretenerse en internet y buscar las diferentes variaciones que han hecho los realmente grandes. Hoy quiero fijarme en una que me gusta mucho. Es breve, contundente, y lo suficientemente arriesgada para ser un momento de esos en que todos, intérpretes y espectadores, aguantan la respiración. Es uno de esos momentos que puede encumbrar a un buen bailarín.
Se trata de la llamada Variación Alí de la coreografía de El Corsario, con música de Adolphe Adam y coreografía del gran Petipa. Aquí se puede ver en las sucesivas versiones del norteamericano Joseph Gatti, el ruso Ruzimatov, y dos de los bailarines más míticos de todos los tiempos: Barysnikov y Rudolph Nureyev. Y, al final, una versión que no desmerece en absoluto cualquiera de las anteriores. De un español, para que luego digan. Ángel Corella, primer bailarín durante muchos años en el Met de NY.
En cuestiones de ballet (como entre tantas otras), no entiendo mucho. Pero me gusta . Salut
Me quedo con los “vuelos” de Mijail Baryshnikov y la elegancia de Nureyev. He disfrutado muchísimo con todos ¡gracias! 🙂
abrazos
Que me ha encantado esta “variación”,¿ acaso existe término mejor? Bss.
Me ha fascinado verlos a todos en la misma ejecución. Es como observar gestos iguales pero distintos. No sabría decirte por cual me decanto, pues si en uno me ha gustado la elegancia, en otro ha sido la potencia, el otro el lirismo de los movimientos… ¡Precioso, no prescindo de ninguno, ya que juntos componen un mosaico completo!
Me gusta la danza, tanto la clásica como la contemporánea, me gusta bailar, creo que si hay otras vidas ( que no lo creo) seré bailarina…
D elos videos que nos has puesto me gustan de abajo arriba, el mejor para mi nureyev, aunque tienes razón que el de Corella no despmerece lo hace francamente bien.
Me ha sorprendido lo del ballet ruso…ya no son lo que eran los años 80…pobres…
Petons
Coincido contigo en que he llegado “tarde” a la danza. ¿Será la edad? De muy joven me esforcé en ver a Cesc Gelabert y Lídia Azzopardi, y debo decir que me dejaron frío (es lo peor que se puede decir del arte). Sin embargo con los años lo he ido comprendiendo, igual como comprendo mejor el arte conceptual. Ahora la danza contemporánea me ha empezado a gustar, y el cambio tuvo algo que ver con mi (anterior) profesión de docente: un día me lié a proponer una actividad alrededor de la peli “Billy Elliot”, y yo mismo descubrí y aprendí. Esta cinta tiene la virtud de explicar el hilo que va des de “El lago de los cisnes” hasta la danza contemporánea y creo que lo hace muy bien.
Por desgracia de danza entiendo poco, aunque he visto varios espectáculos.
Pero me he reído mucho con la descripción del baile ruso, y es que me lo he estado imaginando, un saludo.
En El Gran Teatro de la Habana ví “Un tranvía llamado deseo” en una adaptación de danza con la compañía nacional de Camaguey y me encantó, un saludo.
He vist els cinc videos. i que vols que et digui, els trobo tots fantàstics. Sobretot si considero que aquestos homes, per poder arribar aquí dalt del escenari, han hagut primer, que tenir unes condicions físiques determinades, i desprès, una carrera llarguíssima i molt sacrificada. Anys i mesos obscurs, plens de cops, de trencadures dels dits dels peus, de ferides sagnants, sense deixar ni un dia d’assajar i fer mil exercicis. Te molt mèrit i ho sé de bona tinta, perquè hi tinc gent propera.
Parlant dels russos. Em van dir que el declivi dels grans ballarins del Bolsoi, va ésser degut a que totes les primeres figures, es veu que només mengen “stik”, o sigui filet. Concretament un Kg. de filet diari cada un. Al no poder-s’ho permetre per l’empobriment d’aquells anys, es va perdre qualitat, i van abaixar l’status. (Sempre dient que les fons informatives en aquest cas, no se si són prou fiables).
Un entrada per respirar uns aires diferents, que ja tocava.
Salutacions
Usted si que incursiona en todos los ámbitos, me hace pensar en el personaje de Dorian Grey, aunque ahora no lo recuerdo claramente. No importa, todavía lo estoy imaginando en un escenario y con calzas ajustadas, y me provoco una sonrisa particular. Un abrazo.
Ací a València, i gràcies a la política de Teatres de la Generalitat tenim, això sí, encara, una bona programació al Teatre Principal, de dansa, i tots els anys o passen alguna important com el llac dels cignes o Carmen i el repertori és d’allò més eclèctic, intenta tocar tots els gustos des de coreografies sobre el Bolero de Ravel fins a altres més postmodernes.
La veritat és que mai no m’ha agradat gaire la dansa, però des que la fan ací a València estic agafant-li una certa estima, tot i que només siga amb el gaudi.
Una forta abraçada
Vicent
A veces no caemos en cosas pq pensamos de entrada que no nos interesan y otras, como ahora tu te acercas un poco y te dan una sorpresa.
Qué bien descubrir siempre que hay cosas que nos soprendan.
Un saludo!
La dansa i tots els espectacles físics no m’atreuen. El Cirque de Soleil em deixa fred per la perfecció dels seus moviments i la manera milimetrada d’actuar. Malgrat tot m’ha agradat veure tots els vídeos que proposes i entendre una mica més la dansa clàssica com una part més de la partitura musical, amb les seves normes pròpies.